Los audífonos True Wireless están evolucionando con tecnología de vanguardia. Las opciones en el mercado son muy similares, pero casi nadie está a la altura de marcas como Sony. De hecho, hace poco evaluamos unos Sony WF-1000XM4, y aunque su nomenclatura es compleja, son la prueba de que la marca no ha decaído en calidad. Pero ahora sorprenden con unos extraños audífonos en forma de una dona, que vienen a cambiar el mercado.
Sony LinkBuds es el nombre de los audífonos más extraños hasta el momento. Su diseño único recuerda a la de una dona, aunque han sido descritos por la propia Sony como un “aro abierto“. De cualquier modo son diferentes a todo lo visto en el mercado, puesto que están completamente abiertos, bajo la promesa de escuchar mucho mejor el ruido externo.
Ficha técnica de los Sony LinkBuds
- Peso de auriculares: 4,1 gramos.
- Unidad de diafragma: 12 mm.
- Respuesta en frecuencia: 20-20.000 Hz.
- Conectividad: Bluetooth 5.2, A2DP, AVRCP, HFP, HSP.
- Sistemas compatibles: iOS, Android.
- Autonomía de Auriculares: hasta 5,5 horas.
- Capacidad del Estuche: hasta 12 horas.
- Puertos de carga para el estuche: USB tipo C.
- Extras: certificación IPX4 resistente a lluvia y sudor. Soporte para Alexa y el Asistente de Google.
- Precio: 179 dólares.
Audífonos en forma de una dona, sin cancelación de ruido
Sony asegura que el diseño de anillo en los LinkBuds, con el centro del diafragma abierto a 12 mm, es necesario para prescindir de la cancelación de ruido. Eso le aporta un diseño hasta 50 % menos voluminoso que los anteriores modelos de Sony, los WF-1000XM4. Son muy ligeros, tanto que no sentirás cuando los traigas puesto.
Tampoco necesitan de los tradicionales tapones de silicona, ya que solo se colocan en las orejas sin introducirlos en el canal auditivo. Es posible fijarlos con unos pequeños aros de silicona que acentúan más su forma de dona, pero hay varios de esos aros para mayor flexibilidad. Han sido fabricados en plásticos y materiales reciclados a partir de piezas viejas de autos en Estados Unidos, muy bien trabajados al punto de alcanzar un acabado prémium.
En general se nota su alta calidad y presumen de la certificación IPX4, lo que asegura resistencia al sudor o salpicaduras. También traen un modo transparencia que está siempre activo, para escuchar el ruido exterior con facilidad. Así no tienes que aislarte mientras escuchas tu música.
Es capaz de lograr mayor nitidez en llamadas y audios, gracias a su tecnología Precise Voice Pickup. Un apartado de procesamiento que incluye Sony con algoritmo de reducción de ruido. Te permite escuchar contenido mientras conservas el sonido del entorno, de modo transparente.
Estuche ligero, compacto y más seguro
Con un peso de 34 gramos, su estucho es 26 % más pequeño y hasta un 17 % más ligero que su predecesor. No hace bulto, así que es fácil de llevar a todas partes, muy funcional y sencillo. Además, a diferencia de los modelos tradicionales con cierre magnético, este estuche trae un botón frontal. Así que la tapa no se abrirá a menos que tú lo decidas, presionando el botón.
Puede que no sea el mecanismo más práctico hasta los momentos, pero todo indica en que logran garantizar la seguridad de los audífonos. En el mismo estuche encontramos un LED para confirmar el estado del emparejamiento, y en la parte posterior aprovecha un botón para resetear o vincular el dispositivo. También tiene un puerto USB para la carga. Curiosamente, carece de carga inalámbrica.
Capacidad del control mediante gestos
Los nuevos LinkBuds integran el mismo procesador del WF-1000XM4, y aunque mejoran el audio DSEE, dejan por fuera el soporte del codec LDAC. A la vez buscan la mejor compatibilidad, de modo que se conectan con Android e iOS, mediante la app Headphones Connect que proporciona Sony. También se pueden conectar al ordenador o la tablet, aunque no son multipunto.
Usan Bluetooth 5.2 que permite asegurar la conexión. Por otra parte, el control multimedia se logra a través de un sensor de movimiento en cada auricular, además de una superficie táctil. Para evitar la sensación de golpe de la superficie táctil, solo basta dar unos pequeños toques entre las mejillas y la oreja. Al interactuar con los audífonos en forma de dona, parece que haces magia.
Igualmente, tienen soporte para asistente de voz Google Assistant o Alexa. Lo interesante es que los puedes configurar para dar órdenes con el comando de voz desde el propio audífono.
Autonomía de gran capacidad
Sony no revela el amperaje de la batería, un punto clave en este tipo de audífonos inalámbricos. Sin embargo, aseguran que pueden ofrecer una media de hasta 5,5 horas de uso con una sola carga. Eso depende del volumen y la calidad del sonido. Aun así, esto es suficiente para cubrir poco más de media jornada laboral antes de pasar por el estuche de carga.
Por otra parte, el estuche consigue unas 12 horas de autonomía adicionales, lo que serían dos cargas extras. Teniendo en cuenta su sistema de carga rápida, es capaz de proporcionar hasta hora y media de reproducción, con solamente 10 minutos de carga. En general, esta autonomía se adapta al teletrabajo y uso cotidiano. No están a la par de los WF-1000XM4, pero igual cumplen muy bien.
¿Cuánto cuestan los audífonos en forma de dona?
Actualmente, los LinkBuds tienen un precio estimado de 179 dólares al cambio, a menos que puedas pillarlo con alguna promoción. Ya están disponibles en colores gris y blanco, compitiendo con los Sony WF-1000XM4 a 279 dólares. Aunque estos últimos tienen la mejor cancelación de ruido, Sony decidió cambiar la experiencia con sus nuevos audífonos inalámbricos más interesantes.
Así vemos unos LinkBuds con forma de dona, gran capacidad de audio y sin cancelación de ruido. De este modo permite a los usuarios estar siempre atentos al ruido externo de su alrededor. Y aunque no se encuentran al nivel de los XM4, prometen ofrecer la experiencia sonora equilibrada que esperamos de una marca como Sony. Con una propuesta que promete versatilidad de funciones, calidad de sonido y adecuados para usuarios que se incomodan con la gomilla de silicona.
